La importancia del ajuste de las calas:
Muchas veces, al comprar las calas no le damos importancia a la colocación de la misma en la zapatilla de ciclismo, ya sea de carretera o de montaña. En ocasiones se dejan con una orientación cualquiera o se intenta ajustar a ojo pensando en unas medidas virtuales, que si no son obtenidas de manera precisa podrían perjudicarnos a la hora del pedaleo tanto a corto como a largo plazo dependiendo de las variedades anatomías de cada persona.
A continuación, intentaré explicar cómo colocar las calas en sus 3 ejes de posicionamiento de una manera correcta según nuestra anatomía de modo que podamos prevenir ciertas lesiones.
Como primera medida la colocación de la cala en su eje anteroposterior o AP:
La colocación de la cala en este sentido depende de la propia anatomía ósea del pie, es decir, debemos localizar el centro metatarsal (la base del primer metatarsiano y la base del quinto metatarsiano del pie) y trazar una línea oblicua que llegue de uno al otro punto que hemos indicado anteriormente, el centro de la cala debe caer en la perpendicular a esos dos puntos.
La flexión del tobillo durante el pedaleo sería incorrecta, teniendo demasiada flexión o demasiada extensión, al pedalear tenemos que intentar mantener el pedal paralelo al suelo para maximizar la transferencia de fuerza, en esa posición la zapatilla tiene un ángulo de 5-15 grados, porque las fabrican así, si retrasamos la cala tenderemos a bajar el talón mientras pedaleamos, si adelantamos la cala tenderemos a subir el talón y pedalear de puntillas.
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